La alienación del Optometrista (I)

por | Nov 4, 2016 | 2 Comentarios

Tras 11 años dedicada a la docencia de la Optometría clínica, te enerva seguir escuchando las mismas respuestas que dan los alumnos ante dos preguntas:

  • ¿Cómo os sentís de preparados ahora que acabáis de salir de la carrera?
  • ¿Cómo te ves tras X años que tienes de experiencia profesional?

Los que responden a la primera pregunta, sienten que tienen nociones pero no se sienten entrenados para ningún ejercicio profesional, que responda al nombre de su titulación. Evidentemente, todos piensan haber dedicado un tiempo útil en la Universidad, conocer de qué va la Optometría, ninguno tiene interés en dedicarse al comercio de óptica, y vienen al Master BOSTON para especializarse en clínica. Cuando llevan aquí un par de semanas, y ven las bases que traen, se sienten estafados por su escuela universitaria. Estafa, sí. Esa es la palabra que añaden a su andadura universitaria. De repente no creen que el tiempo dedicado a la Universidad haya sido tan útil y se dan cuenta de que no tenían idea de lo que podía significar ser Optometrista.

estafa

Los que responden a la segunda pregunta… están desmotivados, cansados, frustrados, etc. Algunos tienen 20 años de experiencia en óptica y sienten que hace 15 que tocaron techo. En todos los sentidos. No esperes una formación continua motivante y con rápida aplicación en el día a día, no esperes sueldos que te saquen de mileurista, no esperes nada, que «el que espera, desespera». ¿Qué esperan entonces del Master BOSTON, si no hay nada que esperar? Una opción que les actualice y les permita acceder a un entorno clínico, por varios motivos:

  • quieren dejar de vender gafas, que es honorable como cualquier profesión, pero ellos quieren dejar de hacerlo porque esto se ha convertido en un acto puramente comercial, que roza el estilo del zoco árabe
  • quieren tener mejor horario y conciliar la vida familiar con el trabajo
  • quieren retomar su sueño del acceso a la Universidad en que creían estar accediendo a una profesión sanitaria
  • sienten que han dejado ir una profesión, se han adaptado a un día a día de comercio zarrapastroso, con 0% de desarrollo profesional y por ende, quieren renovarse y adoptar el orgulloso título de optometrista clínico
  • quieren mejor sueldo, a lo que tienes que decirles que probablemente ganen lo mismo o más en la óptica… Tras esto viene una cara tipo Ó_O (las curiosas siglas de Óptico-Optometrista), seguida de un «da igual, no quiero pasarme la vida de vendegafas» y… ¡volvemos al primer punto!

 

cerebro

¿No estás hasta las narices de que tu trabajo no valga una mierda?

Resulta triste que nada cambie. Perdón, miento. Sí hay cambios. A peor. Peores sueldos, peores horarios, peores condiciones de conciliación familiar, peor concepción del «opto… qué?». Sí. La gente sigue diciendo «opto-qué? ¿eso qué es? ¿el que vende gafas?».

Algunas escuelas parece que enseñan algo más a sus alumnos. Ellos no tienen seguridad en nada, pero las cosas al menos le suenan. Otras escuelas son de denuncia pública. Y lo digo con verdadero convencimiento. De denuncia. Los alumnos lo dicen muy bien. Es una estafa. Pero de esto ya hablaremos en otro momento. Hoy quiero atender al objetivo de la mayoría de nuestros alumnos del Máster BOSTON… la clínica.

Bien, pues antes o después, como ellos desean y buscan, les llega el momento de probar suerte en una clínica oftalmológica, hospital o centro de salud. ¿Qué pasa entonces?

  • Las primeras semanas todo es júbilo porque llegó el ansiado cambio. Todo es novedad y readaptación. Están nerviosos porque quieren dar buena impresión y que no se les escape la oportunidad. Es bonito verles tan ilusionados.
  • Al mes, ya te dicen que bueno… siempre hacen lo mismo. Están contentos pero “echo de menos el gabinete”.

Han aprendido sus funciones. Son sencillas. El trabajo es dinámico, el aburrimiento se ha esfumado. El horario es mejor porque ahora los fines de semana son para uno mismo, para los amigos y la familia y no para el zoco árabe, los regateos, inadaptaciones a progresivos, la venta sin ética y la alienación de tu profesión. Pero ojo con esto último. La alienación…

alienacion

Si eres de los que saltó del Máster BOSTON a la clínica, ten cuidado… (acaba de pasar Halloween! Démosle a esto clima de suspense y terror…)

… la alienación te acecha igual que en la óptica.

Mañana te contaré por qué, mientras repasa el significado de alienación o enajenación y piensa por qué te digo esto.

About Sofía Ruiz

2 Comentarios

  1. David

    Calificar de zoco Arabe a las Ópticas de este país no hace ningún favor al sector plagado hoy en día de grandes profesionales que velan por la salud ocular de sus pacientes, que colaboran cada vez más con oftalmologos, que hacen grandes inversiones para dotar los gabinetes de instrumental que en ocasiones no se ve en una clínica y preocupados por por su capital humano. Creo que sus comentarios son muy desafortunados y totalmente desfasados, salga al exterior y busque centros ópticos de esta era. Pido además una rectificación formaldehído este panfleto que lo que busca son alumnos para su master.

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    • Sofía Ruiz

      David, agradezco su comentario que muestra tres cosas. La primera: que es usted una persona preocupada por su profesión, como yo. La segunda: que hay diversidad de opiniones sobre el estado del sector y ello ratifica mi idea de que deben abrirse diferentes opciones de desarrollo para el Óptico-Optometrista. La tercera: que no me ha entendido. Le invito a leer la segunda parte de este post en que verá que defiendo el trabajo en la óptica y no empujo a nadie a la estampida hacia las clínicas. Como bien dice, y como yo opino, hay más opciones de desarrollarse y de realizar un gran trabajo sanitario en las ópticas. Cada uno debe saber que puede aportar y mucho desde su lugar de trabajo.
      Sí me va a permitir que critique, y creo que usted será de la misma opinión, a quienes pretenden convertir las ópticas en zocos con políticas comerciales agresivas y formas un tanto alejadas de la ética profesional. Que las hay.
      No siento que tenga que rectificar nada, pues además faltaría a mi coherencia. Puede ser más o menos correcta, pero es mi opinión. Usted debe ser de los que alzan la voz contra los que nos quieren tenderos y calladitos. Esa es la gente a la que yo llamo desde este blog, así que me alegra saludarle. ¿Quiero alumnos para el Máster? Por supuesto. Igual que usted pacientes para su negocio. Mis alumnos me hacen sonreir por las mañanas y trabajo para hacerlos críticos y serviciales, como yo y como usted.

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